Los documentos de la obra fantasma de Ducoté que costó $120 millones y nunca se hizo

Los fondos fueron girados, y se realizó la licitación. El plan era transformar el barrio Monterrey. A tres años, las calles siguen siendo de tierra y los vecinos no recibieron ninguna mejora.

El 28 de abril de 2016, el Ministerio del Interior, Obras Públicas y Vivienda firmó un convenio la Municipalidad de Pilar, conducida por el entonces intendente Nicolás Ducoté, para la realización de obras de infraestructura básica y fortalecimiento comunitario a desarrollarse los barrios Peruzotti, Salas, Monterrey y Agustoni.

Puntualmente, en el caso del barrio Monterrey el Ministerio del Interior realizó un aporte de $143 millones, luego ajustado a $120 millones, para trasformar completamente el barrio mediante una obra integral para dotarlo de agua corriente, cloacas, luminarias, bacheo de los asfaltos, ionizado de las calles secundarias, renovación estructural de 5 plazas, creación de dos corredores aeróbicos, realización de trabajos hidráulicos anti- inundaciones entre otras obras.

El municipio de Pilar licitó los trabajos y la empresa beneficiada fue la UTE Servicios de Gestión S.A, integrada por Alpin negocios S.A. y Vialme S.A., que debía concluir los trabajos en el plazo de un año. La licitación pública 35/16 se realizó en el 31 de enero de 2017, y la fecha para la ejecución de las obras fue fijada para el 31 de diciembre de 2017.

Sin embargo, pasaron los meses e incluso los años y las obras no se realizaron. Pero lo más grave se detectó cuando al realizarse la rendición de cuentas del municipio, se advirtió que se habían hecho las certificaciones de las obras como realizadas, y el municipio las pagó. Es decir, que se fueron certificando los plazos pese a que los vecinos no tenían las obras prometidas, pero al chequear los balances municipales se pudo comprobar que las obras ya habían sido abonadas.

Estas graves irregularidades llegaron a la justicia que investiga cómo se desarrollaron los hechos, y dónde está el dinero que se pagó pese a que no se hicieron las obras. Según explicaron fuentes judiciales, la excusa del municipio y la empresa fue que habían realizado obras subterráneas, no visibles en superficie, y que las mismas le habían insumido el total de lo presupuestado para el resto de los trabajos. Es decir, se habían ocupado de las tareas invisibles y ya no les quedaban recursos para las visibles.

Inclusive en la ejecución presupuestaria del municipio de Pilar de 2017, puede leerse la previsión de los fondos asignados a las obras de los distintos barrios.

Sin embargo, al recorrer el barrio Monterrey en la localidad de Derqui (Pilar), los peritos advirtieron que no se hicieron ninguna de las obras, ni siquiera las hidráulicas. En la constatación de la calle Paraguay, la arteria principal del barrio, ningún vecino pudo corroborar que las obras hayan al menos comenzado.

Hasta el momento, según las mismas fuentes judiciales, se ha podido constatar que las empresas que participaron de la licitación se han hecho de los fondos nacionales que estaban destinadas a mejorar la calidad de vida de los derquinos, pero las obras no se hicieron y los fondos ya no se encuentran disponibles.

Fuente Ambito.com