El director provincial de seguridad, Marcelo Montero, advirtió que se realizan «cerca de 300 fiestas clandestinas» cada semana» y pidió «multas más elevadas» para los organizadores.
«Recibimos muchos llamados, pero la mayoría corresponden a reuniones familiares o cumpleaños que implican a 20 personas […] Tenemos 1500 denuncias por fin de semana, de los cuales 300 son efectivamente una Fiesta clandestina en la provincia de Buenos Aires con un DJ, centenares de personas y alcohol», declaró Montero en diálogo con Antonio Novas.
El secretario también aclaró que cuando asisten a una fiesta clandestina, se pide el permiso a un juzgado de turno para secuestrar todos los elementos que participan en la fiesta. Sin embargo, aunque no cree que «nadie que haga una fiesta quiera perder todo o recibir una sanción económica, siguen ocurriendo».
Sobre el final, Marcelo explicó que el gobernador puso una multa de hasta 4 millones y medio de pesos para cada organizador y/o propietario.
«Deberían poner una multa más elevada para que nadie vuelva a participar o acelerar las causas judiciales».